Mi tribu de amigas
Imaginar mi vida sin la alegría, la entrega y la complicidad de ellas es imposible. ¿Con quién hicimos nuestras primeras travesuras? ¿Con quién pasamos horas en el teléfono compartiendo dramas de amor en la adolescencia? ¿Quién nos soporta cuando nadie más lo hace? ¿A quién, hasta hoy, le guardamos con mucho cuidado sus más íntimos secretos?
Sin embargo, el tiempo pasa y sucede que el trabajo, la pareja o la familia nos absorben por completo. Y aunque sabemos que el vínculo con nuestras amigas es único, íntimo y sensible, terminamos descuidándolo. Entonces ellas, tan queridas y comprensivas, terminan en segundo lugar. Y así, pueden pasar años, postergándolas a ellas y olvidándonos de lo bien que nos hace a nosotras mismas.
Mis amigas y yo no estamos todas siempre juntas. A veces he faltado yo, a veces alguna otra. Por eso nos emociona si coincidimos todas. Cuando esto sucede resulta ser exactamente lo que cada una necesitaba y siempre terminamos preguntándonos: ¿Por qué no nos vemos más?
Entonces juramos volver a vernos pronto. Luego, la vida cotidiana nos hace olvidar la conexión que sentimos en ese momento y la rutina nos traga completas.
Hay un vínculo especial y poderoso en el encuentro entre mujeres. Es una cosa medio mágica. Pero no es la magia de cuentos de hadas sino la energía de las cualidades femeninas al fluir: comprensión, contención, intuición, apoyo, creatividad. Y eso, está comprobado, nos hace bien. Incluso hay estudios científicos que observan que las mujeres que tienen amigas cercanas viven más.
Louann Brizendine, una neuropsiquiatra estadounidense, que estudia el cerebro femenino, explica que la sensibilidad particular de las mujeres tiene un correlato neuronal que hace que seamos –entre otras cosas- dos veces más propensas a la depresión que los hombres. Eso explica que al rodearnos de otras mujeres nos sintamos identificadas con una sensibilidad como la nuestra, generando una empatía que instintivamente nos hace reconocer que existe un sostén mutuo entre nosotras, y que lo podemos activar apenas alguna lo necesite.
Mis amigas son divertidas, buenas y lúcidas. Son mi tribu. A veces tienen la agudeza de decir algo duro, pero útil. Otras veces se guardan sus discrepancias respetuosamente, y nos dejan ser. Hemos hecho grandes y pequeñas cosas la una por la otra. Desde prestar dinero en momentos difíciles o ir inmediatamente a la casa de alguna si se siente fatal y necesita consuelo, hasta compartir vestidos, aretes, perfumes para una cita emocionante.
También nos hemos fallado y a veces no hemos estado cuando se nos necesitaba. Pero hemos tenido siempre la capacidad de volver y comprender que a veces una simplemente no podía dar nada.
Me conmueve ser testigo de la vida de mis amigas. Acompañarlas en sus batallas y golpes, verlas caer, ayudarlas a levantarse, aprender de sus salidas creativas, apoyarnos cuando nos sentimos perdidas. Me asombra su capacidad para volver a empezar, para sostenerme si no doy más, para cuestionarme, darme y pedirme, para desahogarnos, para escucharnos, para reírnos a carcajadas, para intercambiar historias y hacernos compañía. O para, desde una distancia prudente, hacernos saber que están ahí.
No olvidemos a las mujeres con quienes hemos logrado un vínculo íntimo y fraterno: la energía femenina es poderosa. Si la tienes cerca, enhorabuena. Y si no, llámalas ahora mismo y queden en reunirse. Nunca es tarde. Vale la pena: combate la soledad, alegra y alarga la vida.
Fuente: Natalia Parodi – VIU
Post Recientes
6 recomendaciones para tener una relación saludable
Una de las principales razones por las que una ...Tus células escuchan lo que piensas
...La historia de los otros
...Maneja tu ansiedad
Cuando esta inquietud del ánimo se convierte en...Tratarse bien
...
Comentarios recientes
- nelson massey en Sugerencias para afrontar el último mes del año
- nelson massey en Abrazar ayuda a incrementar el bienestar emocional
- liliana massey en Con el tiempo uno aprende….
- Dioni Duffoo C. en Mi tribu de amigas
- Nelson Massey en Conoce los beneficios de la amistad
Archivo
- Noviembre 2019
- Octubre 2019
- Septiembre 2019
- Agosto 2019
- Julio 2019
- Junio 2019
- Mayo 2019
- Abril 2019
- Marzo 2019
- Febrero 2019
- Enero 2019
- Diciembre 2018
- Noviembre 2018
- Octubre 2018
- Septiembre 2018
- Agosto 2018
- Julio 2018
- Junio 2018
- Mayo 2018
- Abril 2018
- Marzo 2018
- Febrero 2018
- Enero 2018
- Diciembre 2017
- Noviembre 2017
- Octubre 2017
- Septiembre 2017
- Agosto 2017
- Julio 2017
- Junio 2017
- Mayo 2017
- Abril 2017
- Marzo 2017
- Febrero 2017
- Enero 2017
- Diciembre 2016
- Noviembre 2016
- Octubre 2016
- Septiembre 2016
- Agosto 2016
- Julio 2016
- Junio 2016
- Mayo 2016
- Abril 2016
- Marzo 2016
- Febrero 2016
- Enero 2016
- Diciembre 2015
- Noviembre 2015
- Octubre 2015
- Septiembre 2015
- Agosto 2015
- Julio 2015
- Junio 2015
- Mayo 2015
- Abril 2015
- Marzo 2015
- Febrero 2015
- Enero 2015
- Diciembre 2014
- Noviembre 2014
- Octubre 2014
Es una suerte y un gran privilegio tener amigos verdaderos, porque sabes que siempre están ahí….presentes. para todo. Pero también es lindo saber disfrutar la soledad………., no te hace daño, el tiempo pasa y no lo sientes, hay paz interna y se es FELÏZ.